domingo, junio 07, 2015

El Guardia Que Se Convirtió en Murciélago













La bruja al pasar por un castillo vio a un guardia que vigilaba la puerta de entrada le llamó mucho la atención y lo miró  por largo tiempo pasando por su mente muchas ideas; si ella tuviera un guardia en vez de una mascota el guardia remplazaría a su mascota que ya no la tenía se había cansado de ella y ahora podría ser este guardia que era joven, apuesto y seguramente muy valiente a la bruja le gustó mucho la idea, volvería  a buscar al guardia cuando lo tuviera todo planeado.
La bruja volvió al castillo se acercó al guardia, este se asusto; la bruja le dijo: vengo a ofrecerte una vida maravillosa viajarías por lugares que tú no conoces y vivirás conmigo en mí  castillo sería una vida muy entretenida. El guardia se sintió sorprendido; él era solo no tendría problema de irse con la bruja, pero que quería de él.  ¿Porque me ofreces todo eso que quieres de mí preguntó el guardia? La bruja le contestó solo quiero tu compañía, serías mi mascota y creo que mejor que mi mascota; el guardia lo pensó un momento y luego volvió a preguntar ¿Cómo podría acompañarte si yo no vuelo, no te preocupes dijo la bruja  yo ya tengo solucionado todo.
Y en ese momento el guardia se  convirtió en un murciélago, el susto fue terrible él no quería ser un murciélago; que has hecho le dijo a la bruja en que me has convertido yo no quiero ser un murciélago.
La bruja le dice y como vas a volar yo no te puedo llevar en mi escoba y así me puedes acompañar libremente, ver la tierra desde el aire, el mar, las aldeas es algo maravilloso y cuando lleguemos a mi castillo volverás a tu forma humana, te enseñare muchas cosas y serás mi guardia para cuidarme, acompañarme y en el aire serás mi mascota; en la vida no todo es bueno o todo malo y muchas veces tenemos que decidir, pero yo te doy esta oportunidad de cambiar tu vida y si no te acostumbras te llevo de vuelta al castillo donde te encontré. El guardia lo pensó, la bruja le estaba ofreciendo una vida diferente llena de emociones, pero el volar como murciélago no le gustaba, pero, solo sería mientras volaba y sino se acostumbraba volvería a ser el guardia del castillo, la bruja se lo había prometido y así la bruja se quedó con el guardia.    
                                                                                                     Elfridia                30*Abril*2015

       

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