Mis emociones se mezclan con recuerdos de la niñez y la vivencia del momento, al ver niños y adultos llenos de alegría de recibir un regalo, dulces, juguetes, pan de pascua, porque se acerca la Navidad.Creo que el ser humano necesita tan poco para ser feliz, y nos complicamos con tantas cosas que la sociedad en que vivimos nos exige para ser aceptados.
Pienso que el amor es maravilloso y que en la vida siempre está presente. Esos niños que viven casi apartados de la ciudad en pleno campo costero entre cerros y ríos entre bosques y caminos polvorientos te dan algo tan hermoso como la carita iluminada por la alegría y su sonrisa de agradecimiento por pensar en ellos por estar con ellos, y los hace soñar que tal vez en el mañana sean ellos los que traigan regalos y cantos a otros pequeños llenos de ilusiones.
Este trencito que para en cada estación, parada o en cualquier punto del camino donde haya niños esperándolo es como un sueño; lleno de globos y arreglos navideños tocando su bocina y en sus dos carros llevando seres que sólo quieren dar amor, alegría y llenar esos lindos parajes con cantos en que cada nota que salen de sus labios está llena de entusiasmo, transmitiendo lo que sienten, cariño, dedicación y entrega. Ellos están conscientes que sus voces melodiosas son recibidas y agradecidas y en ese mensaje de amor y alegría les llega plenamente.
El trencito está lleno de regalos es como un trencito de juguete serpenteando entre los cerros junto al río y te hace notar que su presencia es muy importante, este viaje que dura algunas horas y que lo hace muchas veces en el año, sólo una vez se convierte en el trencito del amor y de la alegría para los niños, con personas que no conocen, pero los quieren y han organizado y preparado con toda dedicación este trencito de sueños e ilusiones que les lleva amor.
Feliz Navidad Para Todos
Elfridia
Elfridia
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