La Princesa era la tercera de
tres hermanas, la regalona, la más consentida por ser la menor; la reina la adoraba y el rey
la encontraba muy parecida a él, sus hermanas no la querían mucho, era revoltosa y las molestaba con sus
travesuras, la reina les llamaba la atención a ellas y la culpable era la pequeña
Marián, ella se reía de sus hermanas las encontraba tontas y aburridas y el rey la regaloneaba y jugaba con ella por ser la más pequeña , él cuando niño había sido revoltoso, pero era hijo único y solo soportaban sus travesuras sus primos y amigos.
Las hermanas de Marián se habían unido para defenderse de este pequeño
diablillo, pero a medida que fueron creciendo Marián se dio cuenta que debía
cambiar. Sus hermanas empezaron a ser admiradas por todos eran muy hermosas,
finas y delicadas, siempre impecables sus trajes y peinados y Marián parecía un
niño de la Aldea su cabello liso y despeinado y su traje desarreglado, ni la
doncella cuando la vestía lograba dejarla ordenada, era inquieta y no le
importaban los trajes como a sus hermanas que lo elegían cada día con mucho
cuidado para resaltar su hermosa figura, Marián corría como niño cabalgaba como
un jinete y manejaba la espada como un pequeño príncipe, el rey sabía de esto ,
pero lo tomaba como una gracia de su pequeña princesa, pero la reina cuando lo
supo terminó con esta practica de la princesa y empezó a preocuparse en forma
exclusiva de Marián. Fue muy difícil para la reina, Marián se había
acostumbrado a hacer su voluntad y era un poco tarde para corregirla, ella era
por naturaleza rebelde, siempre se habían cumplido todos sus deseos. Marián
empezó a admirar a sus hermanas, después de haberlas encontrado tontas y
aburridas, ellas sabían comportarse como princesas, sus modales, su gracia al
caminar, al sonreír, al hablar, eran muchas cosas que corregir, ella era como
un chico de la Aldea. así le decían sus hermanas:
Marián había logrado mejorar con los cuidados y paciencia de la reina. Habría
un gran baile en el castillo, vendrían los prometidos de las princesas y sería
presentada Marián en su primer baile: la reina eligió su vestido, pero Marián
muy contrariada no lo aceptó, sus hermanas habían elegido siempre sus vestidos.
Porqué ella no podía elegir el suyo? pero la reina no lo permitió y Marián esa
noche lució un hermoso traje que la hacía ver muy hermosa, una belleza natural
llena de vida, libre y rebelde como era ella, el rey estaba feliz de verla tan
hermosa, pero la reina temía que en cualquier momento hiciera una travesura.
El baile fue todo un acontecimiento las princesas felices de conocer a
sus prometidos y Marián fue la más admirada de la fiesta y para tranquilidad de
la reina y sus hermanas su comportamiento fue impecable sin ninguna falta, el
rey se sintió orgulloso de Marián, la reina había logrado que la rebelde
princesita se comportara como una bien educada princesa.
Elfridia
04*Junio*2018
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